domingo, 8 de junio de 2014

El comienzo de una odisea

   A horas de que nazca mi sobrino Homero... publico algo que escribí minutos después que me enteré que iba a ser tío. Un momento de mucha felicidad que llegó a derrotar por knock out a otro momento bastante bajón que estaba atravesando... las vueltas de la vida, no? De un minuto al otro pasás de -100 a + infinito.
   Al estar lejos de casa, solo en el depto, y al ser de madrugada, no se me ocurrió otra cosa más que escribir en ese momento.
   El tema es que ahora me acordé de eso, por que la ansiedad y la alegría es tanta, que me hizo acordar a hace casi 9 meses atrás... con la diferencia que desde ese entonces ese "+ infinito" todavía se mantiene y, si por alguna razón llega a disminuir, es muy fácil volver a alcanzarlo.

   Y esto fue lo que salió en ese momento:

8 de Octubre de 2013. 2.46 am.

Hace un par de horas me contaron que vas a venir. Es tarde, de madrugada, pero para estas noticias no existen horarios. 
Estoy desbordante de alegría. Entre lágrimas y sonrisas. Estoy lejos tuyo,  pero lo que siento en este momento me hace estar muy cerca. Mi imaginación no tiene límites y no paro de pensar en el futuro. En el tuyo y el de toda la familia que no sólo se agranda en cantidad, sino también en amor y felicidad. Una ramita más para este gran árbol que estuvo congelado por un tiempo, pero que ahora crece con vos.
En este momento, me acaba de aparecer una cajita, pegada al corazón. Ahí adentro, hace unas horas (cuando tu mamá me llamó y me contó que vas a venir), empecé a guardar cosas. A ahorrar todo lo que no te voy a poder dar todavía, hasta que llegues. Esas cosas van a estar ahí por siempre, y por más que se usen, nunca, pero nunca se van a acabar: besos, abrazos, sonrisas, canciones, imágenes, historias, y sobre todo, tiempo. Y no va a hacer falta que me pidas nada de eso, porque te va a llegar como sea, desde donde sea.
Faltan unos meses para que te conozca, pero que no te quepan dudas, que desde ahora ya te siento, te pienso y te quiero por lo que sos y lo que vas a ser.
Sigo imaginándote, hasta que te conozca, confiado en que cuando te vea, vas a superar a todas mis expectativas, imágenes e ideas que tuve de vos antes.
Desde ya, te quiero. Tu tío baboso, Bruno.

   Y así, va a pasar este domingo... con más ansiedad que antes de saber la nota de mi último final de la carrera. No sé qué hacer para que pase el tiempo, hasta mañana que llega; hasta dentro de 10 días que lo voy a ir a ver. Mañana Homero ya va a estar "afuera". Se hizo esperar el vago y no quería salir... desde un principio ya se hace rogar o, desde adentro, escuchó con lo que se va a encontrar y está tomando coraje para enfrentarse en vivo y en directo a tan "ruidosa" familia...
   Me voy a... no sé... que sea lo que sea.